El presidente ejecutivo de la revista Vanguardia, Andrés Crespo, calificó este lunes como un atentado a la libertad de expresión, el embargo de las instalaciones y computadores ordenada por el presidente del fideicomiso AGD-CFN, por una deuda de inquilinato. La Fiscalía anunció que investigará este tema.
Crespo explicó este lunes que los pagos del arriendo de las oficinas de Vanguardia en Quito a la empresa Inmodinámica, antes de propiedad del grupo Peñafiel y ahora bajo el control del fideicomiso AGD-CFN, están al día. Explicó que esos valores han sido entregados a un juez de inquilinato en Pichincha.
Pedro Delgado, titular del fideicomiso, afirmó que la noche del viernes actuaron por la ley para precautelar el pago de trece mil dólares adeudados por alquiler de las oficinas.
Mientras que Crespo dijo que presentará un recurso de protección para que le devuelvan los computadores que también se llevaron el viernes.
Advirtió que por primera vez en cinco años la circulación de la revista está en riesgo, lo que no está en riesgo aclaró, es su línea editorial. "Vanguardia seguirá saliendo pase lo que pase o diga lo que diga el Gobierno Nacional", afirmó Crespo
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